Le preguntaron una vez a Labordeta qué preferiría ser, ministro de algo o alcalde. Contestó sin dudar, alcalde, de donde sea, en España, el que manda es el alcalde...
Aunque sea, ya no cito a Labordeta, a costa de la voluntad popular, o mejor aún, comprándola, es tan barato...calendarios, caballos, viajes, calatravas...que hablen de la ciudad, aunque sea bien.
En fin, que nadie puede bañarse dos veces en el mismo río, y me temo que me han robado la parte de la ciudad que me tocaba. Espero que no me roben los recuerdos...
viernes, 28 de diciembre de 2007
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